La recaudación tributaria de la Provincia de Buenos Aires en los primeros seis meses de 2014 llegó a 41.171 millones de pesos. En términos monetarios, esa suba interanual significó unos 10.280 millones de pesos más. El dato aislado sería una excelente noticia para el gobierno provincial pero en verdad marca una notable desaceleración del ritmo de recaudación bonaerense si se lo compara con lo que sucedía hace sólo un par de años.

Esa mejora en la recaudación respecto a lo que pasó en 2013 se acerca a la cifra de inflación anual que miden las consultoras privadas con asiento en la Capital Federal (entre 34 y 35%) y está bastante por arriba de la que arrojó la medición oficial del Indec, cercana al 11 %.

Fuentes del ministerio de Economía provincial consultadas por diario El Día explicaron que la recaudación del primer semestre de 2014 se desaceleró debido a que este año no hubo ningún cambio en la política tributaria como sí sucedió en el 2012, con la reforma del mes de mayo que revaluó la tierra rural y aumentó la alícuota de Ingreso Brutos de los contribuyentes de alta facturación, y en 2013, con la nueva Ley Impositiva que se aplicó en el segundo semestre y que modificó la determinación del impuesto inmobiliario para las personas multi propietarias y ajustó las bases imponibles, entre otros puntos.