La muerte de la joven de 14 años en su casa de calle Brandsen 320 conmueve a la ciudad de Tandil y ocupa y preocupa a los investigadores por las extrañas circunstancias con que se encontraron en el luctuoso escenario.

La principal hipótesis de la pesquisa versaba sobre el homicidio, teoría que se confirmó con la autopsia practicada en la morgue municipal en horas de la mañana.

Ahora, la causa busca dilucidar el o los responsables de la muerte, con las particularidades del caso, habida cuenta que no hay signos visibles de robo ni agresión física contra la víctima, como así tampoco señales de que haya ingresado a la casa algún extraño.

Frente a ello, las especulaciones se inclinan por direccionar las sospechas al entorno más cercano a la joven, con el condimento que hasta aquí las declaraciones recogidas de sus familiares, principalmente su hermano menor de edad (quien dio aviso sobre el macabro hallazgo), no resultaron del todo claras a la hora de explicar las últimas horas de él junto a la víctima. Si a ello se le suma el contexto, con habitaciones cargadas de santuarios. Al decir de los investigadores, la familia practicaba rituales umbandas.

El hecho se conoció alrededor de las 22 del jueves cuando el menor encontró a su hermana en un pasillo de la propiedad, en cercanías al baño, por lo que habría dado inmediato aviso a un vecino, que alertó a la policía. Los padres de ambos no se encontraban al momento del hallazgo, según trascendió.

Más tarde, fuentes policiales confirmaron que el cuerpo fue encontrado en pose de cúbito dorsal, sobre un pasillo, al parecer con marcas en su cuello, y que no se hallaron armas en el interior de la propiedad, por lo que se investiga si se trató de un crimen.

Mientras personal de la policía Científica trabajaba en la escena del hecho, a las 23.45 arribó una unidad de traslado de una casa velatoria, que transportó a la víctima hacia la morgue del Hospital Santamarina. Allí el médico de policía le practicaba la operación de autopsia para determinar las causales de muerte.

En paralelo los uniformados comenzaron a interrogar al entorno de la menor fallecida, identificada como Ayelén Rolando.

En el lugar, ubicado frente a la parte posterior de la tribuna techada del Estado General San Martín, se montó un importante operativo. En concreto, se hicieron presentes efectivos de la comisaría Primera, de la Sub DDI local y de la fiscalía interviniente.

En tanto, vecinos de la zona, que se acercaron al lugar ante el despliegue de patrulleros frente al domicilio, informaron que se trata de una familia "normal" y que la madre de los jóvenes es una empleada del Hospital Municipal "Ramón Santamarina".

También indicaron que al momento del hecho la víctima se encontraba sola con su hermano y que, ante lo ocurrido, se hizo presente también una ambulancia del centro asistencial público.