Tragedia aérea en Brasil: la caja negra captó gritos y una pregunta crucial del copiloto.
Las autoridades pudieron reconstruir la última conversación entre el piloto y el copiloto en la cabina del vuelo 2283 de Voepass antes del trágico accidente que resultó en la muerte de 62 personas.
La investigación del accidente aéreo que cobró la vida de 62 personas en São Paulo avanza con el análisis de las cajas negras del avión ATR-72. Según se ha informado, las grabaciones revelaron las conversaciones entre los pilotos, mostrando los momentos de pánico antes de la tragedia. La transcripción del registro de la cabina indica que el piloto y el copiloto detectaron una abrupta pérdida de altitud, informó TV Globo. El copiloto, Humberto de Campos Alencar e Silva, preguntó qué estaba ocurriendo y sugirió aumentar la potencia del avión para intentar estabilizarlo, pero la aeronave se estrelló un minuto después. La grabación, que tiene una duración de casi dos horas, captó los gritos de los pasajeros y terminó con el estruendo del impacto. Sin embargo, el análisis del audio no proporcionó pistas claras sobre la causa del accidente.
Los investigadores señalaron que el análisis inicial sugiere que el ATR 72-500 descendió bruscamente. A pesar de ello, el audio de la cabina no permitió identificar la causa del siniestro del vuelo 2283 de Voepass, que se estrelló en una zona residencial de Vinhedo, una hora y 26 minutos después de haber despegado de Cascavel.
El avión impactó en el jardín de una casa en el Residencial Recanto Florido, un condominio rodeado de vegetación. La aeronave cayó "de panza" al suelo, y la cabina de pasajeros quedó "aplastada", según los bomberos. Los 58 pasajeros y cuatro tripulantes fallecieron en medio de un amasijo de hierros, y un incendio posterior carbonizó los cuerpos. El avión, un bimotor ATR 72-500 con hélices y capacidad para 68 pasajeros, fue fabricado en Francia. Según ATR, en vuelo de crucero puede alcanzar una velocidad máxima de 510 km/h. Debido a que las hélices están situadas cerca de la cabina, el ruido dificultó la interpretación de los diálogos grabados, según los investigadores. No se identificaron sonidos característicos como los de un incendio, un fallo eléctrico o problemas en los motores que pudieran orientar la investigación.
La principal hipótesis sobre las causas del accidente, planteada por los expertos en los últimos días, es que la aeronave se habría estrellado debido a la formación de hielo en las alas, lo que habría causado una pérdida de estabilidad ("stall" en la jerga). Marcel Moura, director de operaciones de Voepass, reconoció que este modelo de ATR es más sensible al hielo, aunque las condiciones meteorológicas del día del accidente preveían la presencia de hielo dentro de los límites aceptables. Según la Agencia Nacional de Aviación Civil, tanto la tripulación como la aeronave, que estaba en servicio desde 2010, cumplían con todas las normas y certificados vigentes. El informe preliminar del accidente debería estar listo en un plazo de 30 días, durante el cual los investigadores esperan desentrañar el "contexto" de la tragedia.
De acuerdo con los protocolos internacionales, ingenieros franceses de ATR, fabricante del avión, y de la canadiense Pratt & Whitney, fabricante del motor, se han sumado a la investigación, que también cuenta con el apoyo de representantes de BEA y TSB, los organismos encargados de la seguridad aérea en ambos países, con profundo conocimiento de los sistemas de este modelo de avión.