todo tipo de proyectos para reducir la contaminación del aire en zonas urbanas la contaminación atmosférica es responsable de entre el 25% y el 33% de las muertes por ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, cáncer de pulmón y enfermedades respiratorias.

El proyecto Respirar trabaja en un estudio de viabilidad del uso de barreras (cercos) verdes sostenibles para atenuar la contaminación atmosférica urbana hasta en un 50 por ciento. INTA AMBA es parte de esa propuesta mediante el trabajo de la especialista Beatriz Zumalave Rey, formada a partir del programa interuniversitario internacional.

Las barreras verdes de diseño mixto son estructuras formadas por materiales reciclados y plantas vivas que disminuyen los niveles de contaminación del aire en un porcentaje que oscila entre el 15-50 por ciento (Baldauf et al., 2008), comenta la especialista.

Este proyecto de investigación y de innovación tecnológica espera colaborar para mitigar la exposición a la contaminación atmosférica en patios de juegos de escuelas, en las cuales hay niños y adolescentes que respiran de manera permanente material particulado y monóxido de carbono, principalmente producidos por fuentes móviles de las áreas urbanas y periurbanas de grandes ciudades como Buenos Aires.

Beatriz Zumalave Rey dijo que "la ciencia tiene permanentemente una carrera de postas donde estamos todo el tiempo en transición, todo el tiempo son verdades provisorias, todo el tiempo debemos trabajar para construir algo verdaderamente superador".

En esta línea de disminuir el impacto de la contaminación atmosférica es que los investigadores planifican y operativizan un modelo replicable de responsabilidad social con respuesta a la problemática, y brinde desde la innovación una salida laboral a familias carenciadas con la construcción de los cercos verdes y sectores diseñados con materiales reciclados. También, reducir la contaminación Asimismo, agregan los organizadores, se busca que puedan colaborar en la mitigación de la contaminación atmosférica incluyendo la perspectiva social, económica y ambiental.

Según Zumalave Rey, desde 2007 el 50 por ciento de la población habita las áreas urbanas: "Estos números siguen aumentando y con ellos sus consecuencias, porque la tendencia va in creciendo de manera sostenida pero no sustentable" por lo que se pretende una vuelta hacia los "servicios ecosistémicos perdidos para mejorar las condiciones ambientales y las acciones tendientes a mitigar o remediar los daños a la salud de las personas y por ende el ambiente en el que desarrollan una vida de calidad".

De esta manera, la propuesta de Respirar se constituye como una tarea interdisciplinaria para lograr la sostenibilidad urbana, la salud y el bienestar, según afirman desde el INTA. "Entre otras herramientas estratégicas trabajamos desde la agroecología como práctica de producción sustentable, recomendaciones en relación el ordenamiento territorial y el manejo de cuencas, sustitución de agroquímicos, uso del compostaje, y manejo de la fracción orgánica de los residuos sólidos urbanos y agroindustriales", dice la investigadora.

Respirar, sostiene un comunicado de prensa, "intenta mejorar la comprensión acerca de la mitigación de la contaminación atmosférica utilizando vegetación y materiales sostenibles pensados para desarrollar estrategias superadoras y controlar la contaminación del aire".

"Desde la transición agroecológica -acotó Zumalaye Rey- podemos colaborar desde cuatro elementos clave: aumento de la autonomía de los sistemas, lograr sistemas de bajo riesgo, optimizar recursos, lograr la agrodiversifcación.

En este sentido ya contamos con experiencias agroecológicas en el periurbano".

"Ciencia ciudadana" El proyecto se inició con la investigación de estudiantes trabajando con el Sheffi eld City Council y las escuelas de Sheffield (Reino Unido) que están instalando las barreras verdes para desarrollar tipologías alternativas de barreras y métodos pre y posteficaces para monitorear los resultados, es decir, antes y después de que se instalen las barreras. Siempre que sea posible, se desarrollarán enfoques de "ciencia ciudadana" para el monitoreo a fin de que el personal y los alumnos puedan participar plenamente en el proceso de investigación.

La estrategia de investigación llevada a cabo se replicará en colaboración con estudiantes y personal de la Universidad de Buenos Aires, y con las comunidades locales, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y las partes interesadas para diseñar e instalar barreras prototípicas contextualmente apropiadas en una escuela en Buenos Aires y monitorear los resultados utilizando los métodos desarrollados en la Fase 1.