Análisis de Gonzalo Chávez: “El tipo de cambio es el escultor de las realidades paralelas que estamos viviendo”
El economista Gonzalo Chávez ofreció un análisis crítico sobre la situación económica actual de Bolivia, centrándose en el manejo del tipo de cambio, al que describió como “el gran escultor de las realidades paralelas”. Según Chávez, la falta de acceso al dólar oficial a 6.96 bolivianos y la existencia de un mercado paralelo que fluctúa entre 11 y 12 bolivianos han creado un entorno de distorsión económica que afecta tanto a importadores como a exportadores.
“El GPS de la economía boliviana está perdido”
Chávez señaló que la política económica del gobierno ha perdido el rumbo:
“El presidente Arce parece haber extraviado el GPS de la realidad económica. La brújula económica ya no apunta al norte, y eso se nota claramente”. Para él, la negativa del gobierno a reconocer que el tipo de cambio oficial es insostenible genera una brecha entre la política oficial y la realidad del mercado, causando impactos negativos en la economía nacional.
El espejismo del tipo de cambio oficial
El economista comparó el tipo de cambio oficial con un espejismo, indicando que es prácticamente imposible conseguir dólares a esa tasa:
“Conseguir dólares al precio oficial es tan probable como ver flamencos bailando cueca. O sea, no va a ocurrir”.
Esta situación, según Chávez, ha provocado un encarecimiento de los bienes importados, que llegan al país con precios desorbitados, mientras que los exportadores reciben menos por sus dólares, afectando la competitividad de la economía.
El impacto en la inflación y el contrabando
Chávez destacó que el contrabando ha florecido debido a las distorsiones cambiarias, convirtiéndose en un problema estructural:
“El contrabando no se lo resuelve solo a palos. Necesitas realinear los precios relativos, y esto se lo hace a través del tipo de cambio”.
En este sentido, indicó que las medidas represivas, como el despliegue de policías o la presencia de la “familia Silva” en las fronteras, no solucionan el problema de fondo.
La devaluación encubierta
Aunque el gobierno niega haber devaluado, Chávez sostuvo que la devaluación ya es una realidad:
“El tipo de cambio nominal ya se ha devaluado y el gobierno no se ha enterado. Ya no hay dólar a 6.86 o 6.96. El dólar que importadores y exportadores legales e ilegales consiguen está a 11, 12 bolivianos”.
Este fenómeno, explicó, ha generado una inflación indirecta que afecta a los consumidores y crea un entorno de incertidumbre económica.
Conclusión: enfrentar la realidad económica
Chávez finalizó su análisis haciendo un llamado a enfrentar la realidad del mercado cambiario y ajustar las políticas económicas:
“Mientras sigamos negando esta obviedad, las rentas comerciales seguirán multiplicándose para unos pocos, mientras los demás vemos desde la tribuna cómo la inflación aumenta”.
Para Chávez, Bolivia debe abandonar las políticas que perpetúan las distorsiones económicas y optar por un enfoque más realista que estabilice el tipo de cambio y restablezca la confianza en la economía.