El martes pasado, representantes de Cuba y Estados Unidos se encontraron en La Habana para abordar la cuestión migratoria, que ha experimentado un aumento significativo en las llegadas irregulares de cubanos a suelo estadounidense desde agosto.

El Departamento de Estado de Estados Unidos, a través de un comunicado, reiteró su compromiso con el objetivo fundamental de asegurar "una migración segura, ordenada, humana y regular" entre ambos países.

La delegación estadounidense estuvo encabezada por Eric Jacobstein, subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.

Aunque durante la primera mitad del año la migración irregular desde Cuba disminuyó, gracias al programa conocido como Parole, implementado en enero por la administración de Joe Biden, se ha observado un cambio en la tendencia. Este programa estaba diseñado para facilitar la migración legal de cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos. Entre enero y octubre, aproximadamente 55,368 cubanos volaron directamente a Estados Unidos bajo este programa.

Sin embargo, durante el mismo período, 108,529 cubanos llegaron de manera irregular a Estados Unidos, con un aumento notable de 46,451 llegadas en los meses de agosto, septiembre y octubre, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.

Cabe destacar que Cuba reconoció que, por segundo año consecutivo, Estados Unidos emitió 20,000 visas de inmigrantes de acuerdo con los acuerdos establecidos.

En la semana anterior, las autoridades estadounidenses expresaron su inquietud por el "dramático" aumento de vuelos subarrendados que facilitan la migración irregular desde Cuba hacia Nicaragua, desde donde los cubanos inician su travesía hacia la frontera estadounidense.

El subsecretario de estado estadounidense, Brian Nichols, declaró: "Nadie debería beneficiarse de la desesperación de los migrantes vulnerables."

Por su parte, el viceministro de Exteriores del régimen cubano, Carlos Fernández de Cossío, informó que estos vuelos irregulares ya han comenzado a disminuir. "Esa situación ya no está presente, ya no es tal como se presentó en aquel momento", señaló.

La emigración masiva de cubanos se intensificó en noviembre de 2021, cuando el régimen de Nicaragua eliminó el requisito de visado. En 2022, alrededor de 313,000 cubanos tomaron ese camino.

Las conversaciones migratorias entre el régimen cubano y el gobierno de Estados Unidos se reanudaron en abril de 2022, después de haber sido suspendidas en 2017 cuando el gobierno de Donald Trump retiró el personal diplomático debido a los ataques sónicos. Aunque en mayo de 2022 se reabrió el consulado y se inició la entrega de visas para la reunificación familiar, los cubanos aún deben viajar a un tercer país para solicitar una visa de turista.