"Mi gol volvió a meternos en partido. Sabía que teníamos que marcar y, de ser posible, cuanto antes. En el mismo momento en el que lo hice, volví a tener una buena sensación, supe que podíamos ganar", reconoció Van Persie, según el sitio oficial de la FIFA.

"Y, sobre todo desde mi punto de vista, tenía muchísimas ganas de lograrlo, porque era consciente de que iba a perderme el partido con Chile. Eso me irrita", agregó.

El delantero que suma tres goles en dos partidos admitió, no obstante, que "fue muy difícil dar vuelta el resultado" ante los de Oceanía, aunque explicó que eso se debe a que están participando en la prestigiosa cita ecuménica de este deporte.

"¡Bienvenidos al Mundial! Este es el mayor torneo del mundo, con la flor y nata de los jugadores, así que es normal pasar aprietos. Fue lo que ocurrió contra Australia, y volverá a pasar la semana que viene, y también la próxima", manifestó.

"Insisto, esto es un Mundial. Pero lo principal es que estamos clasificados", agregó el jugador de Manchester United, de Inglaterra.
Luego estimó "revelador que hayamos remontado el marcador así dos veces. Y es tremendo que lo hayamos logrado sometidos a una presión como esa, porque Australia no dejó de correr. El rival jugó muy bien".

Van Persie aseguró que en la primera etapa ante los oceánicos "no jugaron nada bien, en absoluto", pero que "tampoco se puede pretender hacer un fútbol fantástico desde el principio hasta el final en todos los partidos de un torneo".

"También hay encuentros así, que hay que ganar. Y tuvimos el mérito de hacerlo", puntualizó el autor de dos tantos en el 5-1 ante España y uno en el 3-2 contra Australia.

Van Persie, de 30 años, deberá a esperar hasta los octavos de final para volver a ser de la partida con los "naranjas".

Holanda y Chile son los dos clasificados para esa instancia, ya que tienen 6 puntos, mientras que España, el último campeón del mundo, y Australia no suman unidades, cuando quedan tres en juego.

El plantel holandés se volverá a entrenar este sábado en las instalaciones de Flamengo, en Río de Janeiro.