Los Gladiadores consiguieron un triunfo histórico contra una de las potencias mundiales de este deporte, medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Río 2016, y tienen muchas posibilidades de meterse entre los ocho mejores equipos del Mundial por primera vez en sus 13 participaciones.

Mañana, los argentinos enfrentarán a Qatar en el cierre de la Main Round, donde gracias a la victoria de ayer suman 6 puntos siguen en los primeros puestos y dejaron tercera a Croacia (con 5). Para Los Gladiadores, cuyo único antecedente positivo ante los croatas era una victoria por 30-29 en el Mundial 2003 de Portugal, ya es un campeonato histórico.

Es que nunca habían ganado en la segunda ronda del torneo ecuménico. Las mejores actuaciones del seleccionado nacional -en las 12 participaciones anteriores- fueron el decimosegundo puesto en Suecia 2011 y Qatar 2015.

La victoria de ayer nada menos que contra Croacia, actual subcampeón europeo y que los había derrotado en tres de los cuatro partidos oficiales que habían jugado anteriormente, el último en los Juegos de Río 2016 (por un ajustado 27-26), les da a los argentinos una gran chance de depender de sí mismos para pasar a cuartos.

Croacia, con muchos podios en los Mundiales (campeón 2003, subcampeón en 1995, 2005 y 2009, bronce en 2013), sintió tanto la derrota que el técnico Lino Cervar -una leyenda del handball de su país, de 70 años- presentó la renuncia ni bien terminó el partido en vivo para la televisión.

Simonet. El armador central Diego Simonet, máxima figura del seleccionado argentino masculino de handball, destacó "la capacidad del equipo para poner en problemas" a sus rivales, al explicar la victoria ante Croacia.

"Lo que destaco es que jugamos en equipo, que es nuestro fuerte. No tenemos estrellas, sabemos que si no estamos todos comprometidos y al ciento por ciento y jugando en equipo no podemos hacer nada. Hoy fue todo eso: lo de hoy fue un gran trabajo en equipo".