El presidente Joe Biden ha generado un amplio revuelo al anunciar por decreto que el 31 de marzo, coincidiendo con el Domingo de Pascua, será oficialmente reconocido como el "Día de la Visibilidad Transgénero" en Estados Unidos. Esta medida, que busca conmemorar y reconocer a la comunidad transgénero, ha desatado fuertes críticas y acusaciones de insulto hacia la comunidad cristiana.

La fecha, establecida por la activista trans Rachel Crandall en 2009, había sido previamente conmemorada por Biden en 2021, pero este año adquiere un significado especial al coincidir con una de las festividades más importantes del cristianismo. Esta coincidencia ha llevado a líderes republicanos a denunciar la decisión como un acto de provocación deliberada por parte del presidente.

Los críticos señalan que, además de declarar el "Día de la Visibilidad Trans", la administración Biden también ha prohibido imágenes religiosas en el tradicional evento de la Rollo de Huevos de Pascua, generando un clima de tensión y controversia en torno a la celebración.

El presidente de la Cámara de Diputados, Mike Johnson, y la diputada Marjorie Taylor Greene, entre otros, han condenado enérgicamente la medida, acusando a Biden de traicionar los valores y principios fundamentales de la Pascua. Incluso el expresidente Donald Trump ha exigido una disculpa pública por parte de Biden hacia la comunidad cristiana y católica de Estados Unidos.

La decisión de Biden ha avivado el debate sobre el equilibrio entre la inclusión y el respeto a las tradiciones religiosas en el contexto de la política nacional, generando divisiones y confrontaciones en un país profundamente polarizado. Mientras tanto, la controversia continúa sin resolverse, dejando en evidencia las tensiones existentes en la sociedad estadounidense.