Según el último recuento, la cifra de víctimas se sitúa en "59 muertos y 143 heridos", afirmó a EFE Rajesh Sharma, jefe de la administración de la subdivisión de Amritsar, en el estado de Punyab, donde ocurrió la tragedia.

Las víctimas estaban celebrando muy cerca de las vías uno de los momentos cúlmine de la festividad hindú de Dussehra, en la que los devotos queman efigies del demonio Ravana y hacen estallar petardos, por lo que no se percataron de la llegada del primer tren.

Sharma dijo que la tragedia se produjo por el impacto de dos trenes, que atravesaron el lugar con pocos segundos de diferencia, y anunció el comienzo de una investigación para determinar en un mes las responsabilidades por el accidente.

Las cadenas de televisión locales mostraron imágenes de cómo algunos devotos presenciaban las hogueras en la oscuridad de la tarde cerca de las vías y próximas a un paso a nivel cuando de pronto un tren atravesó el lugar a gran velocidad y poco después un segundo circuló en sentido contrario.

En noviembre de 2016, en uno de los peores accidentes de la última década, 146 personas murieron al descarrilarse un tren en el norte de la India, y en 2010 otras 145 murieron en un accidente similar en el este del país.

La red ferroviaria india, con 65.000 kilómetros de recorrido, es la cuarta más larga del mundo, detrás de las de Estados Unidos, Rusia y China, y cuenta con 1,3 millones de empleados y 12.500 trenes, que transportan a diario a unos 23 millones de pasajeros.

Según el último informe difundido por el Buró Nacional de Registro de Crímenes (NCRB) de la India, en 2015 se produjeron 29.419 accidentes relacionados con la red ferroviaria del país, en los que murieron 26.066 personas.

Ese mismo año se produjeron 2.669 accidentes relacionados con el cruce a través de las vías de tren, que causaron 2.650 muertos. (Télam)