El miércoles, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró una emergencia de salud pública de importancia internacional debido al brote de viruela símica que ha afectado a más de una decena de países en África. Este es el segundo brote de viruela símica en los últimos tres años que se ha catalogado como emergencia global.

Situación en el Congo: La República Democrática del Congo se encuentra en el centro de esta crisis, con 15.600 casos reportados y 537 muertes confirmadas, según datos de la ONU. El brote actual supera en severidad al registrado en 2022, año en que también se declaró una emergencia sanitaria por esta enfermedad.

Características del virus: El virus de la viruela símica, endémico en África central y occidental, es similar a la viruela pero menos contagioso. La enfermedad se transmite principalmente a través del contacto cercano con animales infectados o personas, y también puede propagarse por contacto sexual y de madre a hijo durante el embarazo.

Impacto global: El brote se ha extendido a 13 países adicionales, incluyendo naciones de África oriental como Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda. Cada región presenta características distintas, pero el desconocimiento sobre cómo controlar el brote es una constante.

Síntomas y tratamiento: Los síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares y una erupción que evoluciona a pústulas. El tratamiento suele ser de apoyo, centrado en aliviar los síntomas. La mortalidad es mayor en niños pequeños y personas inmunodeprimidas.

Vacunas y prevención: Aunque se usaron vacunas durante el brote de 2022, estas no son suficientes para enfrentar la crisis actual. El distanciamiento social ha demostrado ser útil para reducir la propagación en algunos lugares. Sin embargo, las condiciones de hacinamiento en el Congo dificultan la implementación de medidas de aislamiento efectivas.

Historia y contexto: La viruela símica fue identificada por primera vez en 1958 en monos y se confirmó en humanos en 1970 en el Congo. La epidemia de 2022 llevó a que la OMS declarara una emergencia sanitaria internacional. Desde entonces, se han registrado casi 100.000 casos en 116 países.

Poblaciones en riesgo: La cepa actual en el Congo presenta una tasa de mortalidad del 3%, significativamente superior al 0,2% del brote de 2022. Las mujeres y los niños son los más afectados, con casos severos en recién nacidos debido a la saturación de los hospitales.

Conclusión: La situación es desgarradora para muchas familias que enfrentan el brote en medio de condiciones adversas. La comunidad internacional debe redoblar esfuerzos para controlar la propagación y apoyar a las regiones más afectadas.