Decenas de extranjeros y heridos lograron salir hoy de los territorios palestinos de la Franja de Gaza y cruzaron hacia Egipto a través del paso de Rafah, que fue abierto por primera vez desde el inicio de la escalada entre Israel y el movimiento islamista Hamas.

Aunque no se tiene un número exacto de las personas que lograron salir por Rafah, imágenes en directo desde el lugar mostraban a una multitud ingresando en el territorio egipcio. 

Los extranjeros fueron autorizados a ingresar al paso por la mañana, después de que las autoridades anunciaran su apertura excepcional para permitir el paso de casi 90 heridos y unos 545 extranjeros.

Previamente, los responsables palestinos del Rafah publicaron la lista con el nombre, la nacionalidad y el número de pasaporte de los extranjeros autorizados a salir hacia Egipto.

Según un responsable palestino, un total de 88 heridos, entre ellos 40 niños, mujeres y ancianos, serán hospitalizados en Egipto. 

El Ministerio de Salud del Gobierno de Hamas en Gaza ha transmitido a Egipto una lista de 4.000 heridos que necesitan tratamientos que no están disponibles en este territorio palestino, según el vocero del grupo palestino, Ashraf al Qudra.

Luego del ataque israelí al campo de refugiados, Egipto abrió el pase fronterizo

"Esperamos que puedan partir en los próximos días porque deben ser sometidos a operaciones quirúrgicas que no se pueden hacer en Gaza. Hay que salvarles la vida", dijo.

En la Franja de Gaza hay actualmente extranjeros de 44 países diferentes y de 28 organismos, organizaciones y ONG extranjeras, según fuentes diplomáticas.

Desde los ataques de Hamas del 7 de octubre en Israel, que dejaron más de 1.400 muertos, la Franja de Gaza sufre los incesantes bombardeos de Israel que provocaron 8.525 víctimas mortales, según el Ministerio de Salud del enclave.

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En la Franja de Gaza, una zona densamente poblada que alberga a 2,4 millones de habitantes, la situación es desesperada. 

Desde el 9 de octubre, Israel ha impuesto un asedio total, dejando a los habitantes sin acceso a agua, electricidad y alimentos básicos. 

Bajo estas difíciles circunstancias, la vida se vuelve cada vez más difícil para los residentes de Gaza. Recientemente, se produjo un ataque israelí en Jabaliya, el mayor campo de refugiados de Gaza, que según Hamas, resultó en la muerte de 50 palestinos. 

En respuesta a este ataque, Egipto condenó enérgicamente la acción y advirtió sobre las consecuencias de continuar atacando a civiles indefensos. 

El ejército israelí justificó el bombardeo en Jabaliya como un intento de eliminar a un comandante de Hamas implicado en un ataque previo en Israel, donde murieron más de 1.400 personas. 

Sin embargo, es importante destacar que desde el inicio de los bombardeos israelíes el 7 de octubre, al menos 8.525 personas han perdido la vida en la Franja de Gaza, la mayoría de ellos civiles, incluyendo a 3.542 niños. 

En medio de este conflicto, Hamas ha capturado al menos a 240 personas, la mayoría de ellas rehenes civiles pero también hay militares involucrados.

Esta situación solo agrava aún más la tensión en la región y dificulta cualquier posibilidad de diálogo y resolución pacífica. 

La comunidad internacional ha instado a ambas partes a detener la violencia y a buscar una solución negociada. 

Es fundamental que se garantice la seguridad y el bienestar de los habitantes de Gaza, quienes se encuentran atrapados en medio de este conflicto y sufren las consecuencias devastadoras de los bombardeos y el asedio.