El primero de los episodios se registró minutos después de las 2 de la madrugada, cuando personal de la comisaría Segunda logró la interceptación de dos individuos a la altura de Celestino Muñoz al 2400, entre Bolívar y Hornos. Los movimientos sospechosos de los desconocidos habían despertado las sospechas de los agentes de seguridad, lo que motivó el procedimiento.

Según se logró saber, habrían sido testigos de cómo salían de una propiedad lindera. Lo concreto fue que al momento de ser identificados se logró el secuestro de seis packs de cervezas. Las averiguaciones posteriores lograron determinar que todo había sido sustraído de un comercio lindero, ubicado sobre Bolívar al 4200.

Se pudo reconstruir que los desconocidos habían logrado escalar un paredón y posteriormente violentar el portón del depósito, donde sustrajeron los elementos. Fueron remitidos a la sede de la comisaría Segunda, en donde se les iniciaron actuaciones por "robo calificado por escalamiento y efracción in fraganti delito". En horas del mediodía fueron indagados por la fiscal en turno Viviana Beytía, responsable de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 10, quien dispuso que recuperen la libertad, pese a seguir procesados por el hecho.

Horas más tarde, minutos antes después de las 7, también personal de la comisaría Segunda logró llevar adelante la aprehensión de un hombre de 37 años. Todo se dio en virtud de un llamado al servicio de emergencias por parte de un vecino de las cercanías del barrio Pro Casa. En la comunicación se alertó de la presencia de un desconocido en una vivienda ubicada sobre José Luis Torres al 4400, entre Leal y Moya.

En ese lugar funcionaría un taller mecánico y el delincuente habría logrado sustraer la batería de un auto que se encontraba en reparación. Cuando escapaba del lugar se percató del arribo de los agentes, por lo que se desprendió de lo robado e intentó sin éxito abandonar ese sitio. Fue interceptado a los pocos metros y remitido a la sede policial. Se le iniciaron actuaciones por el delito de "hurto in fraganti delito" y recuperó la libertad a primera hora de la tarde, luego de que lo disponga la fiscal en turno una vez finalizada la recepción de la declaración indagatoria.

Más casos

Otros dos hechos delictivos se registraron con escasos minutos de diferencia pero ya dentro de lo que es la jurisdicción de la comisaría Primera. El primero de ellos tuvo ribetes sumamente sorpresivos debido que la víctima fue un distribuidor de especias, quien ni se había percatado de lo sucedido, debido a que estaba en un local comercial. El caso restante respondió nuevamente a un intento de robo a un vehículo estacionado.

El primero de los hechos descriptos ocurrió poco después de las 8 sobre Azopardo al 1800, entre Independencia y San Lorenzo, en el barrio Independencia. En ese sitio se encontraba estacionado un vehículo de los denominados utilitarios, mientras su conductor se encontraba en un comercio cercano.

Ese momento fue aprovechado por un delincuente para sustraer 45 paquetes de especias. Se trataron de sobres de pimientón, comino, provenzal, orégano y especias surtidas, que fueron secuestradas en poder del desconocido. El hecho pudo ser esclarecido gracias al personal del servicio de monitoreo municipal, desde donde se percibió cada uno de los movimientos y se alertó a personal de la comisaría Primera para la posterior aprehensión.

El presunto autor fue llevado a la comisaría Primera y el dato para nada menor se dio al momento de identificarlo. Cuando se cursaron sus datos se logró establecer que el individuo gozaba del beneficio de la libertad condicional por otro hecho delictivo, cuya medida había sido dispuesta desde el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 1 del Departamento Judicial de Azul, que ya fue notificado de la situación y se espera que resuelva al respecto.

Por el otro episodio se le iniciaron actuaciones por "hurto in fraganti delito" y la fiscal Viviana Beytía dispuso que se le otorgue la libertad una vez tomados todos los recaudos legales.

El caso restante se registró de forma prácticamente simultánea en una vivienda ubicada sobre Moreno al 2700, entre General Paz y San Martín, en pleno centro de la ciudad. Un llamado al servicio de emergencias alertó sobre los movimientos sospechosos de un desconocido, quien habría logrado sobrepasar un portón de rejas de alrededor de dos metros para ingresar a la propiedad. En ese sitio forzó una camioneta y comenzó a apoderarse de diversos elementos que se encontraban en la parte trasera, como el criquet y la rueda de auxilio, entre otras pertenencias.

Logró ser interceptado a los pocos metros. Se le inició una causa por "robo agravado por efracción y escalamiento in fraganti delito". Abandonó la sede policial ya en horas de la tarde, cuando finalizó su declaración indagatoria ante la doctora Viviana Beytía.