Piden que se cumpla con la cláusula de revisión acordada el año pasado y que representa un incremento del 16% en los sueldos básicos de los trabajadores de la sanidad para no quedar por debajo de la inflación registrada en el 2020.

En este contexto, hoy se realizarán asambleas y mañana se hará un quite de colaboración de tres horas por turno. La medida de fuerza impactará en nuestra ciudad en las clínicas privadas donde se concentra la mayor parte de los trabajadores nucleados en ATSA (Asociación de Trabajadores de la Sanidad) que integra a unos 700 trabajadores en Olavarría.

"Es lamentable que trabajadores que hoy son sumamente necesarios tengamos que tomar esta medida, pero no somos responsables de esta situación", sintetizó el referente del gremio en nuestra ciudad, Carlos Manzur en una conferencia de prensa que encabezó ayer junto con los delegados del Sanatorio Cemeda Iván Rojo y Rosa Chirino, de María Auxiliadora Darío Canale y Andrea Cos; y Roberto Saunders (Loma Negra).

El paro se realizará en sintonía con la medida que desarrollará FATSA, la federación que nuclea a las asociaciones de trabajadores de la sanidad en todo el territorio nacional.

En este contexto, "se van a cumplir con las guardias mínimas. Si alguien concurre por una necesidad imperiosa va a ser atendido, los internados también serán atendidos en lo mínimo e indispensable. Lo que no vamos a permitir es que haya cirugías que puede programarse y que no son de urgencia", dijo el titular de ATSA en nuestra ciudad.

Y aclaró que "hay trabajadores que todavía no se han enterado, otros que por su trabajo no pueden plegarse como es el caso de los geriátricos, consultorios particulares y emergencias medicas, así como radiólogos. Es muy grande el cupo de los trabajadores, no solamente abarcan las clínicas, por eso esperemos que el impacto de los lugares donde mayor cantidad de trabajadores nuclea sea el que dé la nota y el paso para seguir adelante".

Situación

A media mañana, en la sede de ATSA (Sargento Cabral 2480), Carlos Manzur anunció que el plan de lucha comenzará con asambleas que realizarán hoy para informar a los trabajadores los pasos a seguir en materia de reclamo salarial. Mañana por su parte, se realizará el paro que será de tres horas por cada turno.

"Está bien que recibimos aplausos y mimos, pero con el aplauso los compañeros no llevan la comida a la casa y hoy un salario de un trabajador de la sanidad está por debajo de la línea de la pobreza fijado en 58 mil pesos. Tenemos que decir que nosotros estamos con básico de 50 mil pesos".

En este contexto, "no alcanza", señaló el dirigente gremial que no dejó pasar por alto que estamos frente a la posibilidad de un segundo brote de casos por Covid "donde sabemos que vamos a tener que estar otra vez al frente de batalla poniéndole el pecho, trabajando horas a destajo y sin recursos en la mayoría de los casos".

Las expectativas del sector están puestas en lo que sucederá el lunes en un encuentro previsto entre la parte sindical y las cámaras empresariales en el Ministerio de Trabajo. "Si no hay una solución rápida, las medidas de fuerza se van a ir incrementando".

Manzur explicó que "tengo entendido que las cámaras empresariales están de acuerdo con nuestra petición pero con eso no nos alcanza, necesitamos que ellos también salgan a plantearles a las obras sociales nacional y provinciales, de las cuales la mayor parte de las clínicas dependen, que les aumenten la cápitas o el valor de las prestaciones que vienen atrasadas desde 2019. Nosotros entendemos eso, pero no somos empleados ni de IOMA ni de PAMI, somos trabajadores y hay empresarios que se han puesto al frente de las instituciones, por lo tanto el riesgo laboral es de ellos, no es nuestro".

Finalmente, el dirigente gremial se refirió a la ayuda estatal que han tenido las clínicas. Primero fueron los ATP que se han pagado durante el 2020 y ahora está el denominado Repro al que han podido acceder aquellas instituciones que cumplieron con los requisitos.

"Nosotros estamos en la trinchera porque elegimos cuidar a la gente"

Como trabajador de la sanidad, Iván Rojo reflejó el sentir de todos sus compañeros en un año que ha sido sumamente difícil y atípico.

"Nosotros estamos en la trinchera porque elegimos cuidar a la gente. Elegimos esta profesión por vocación y creo que cualquier enfermero sentiría que es un privilegio poder vivir esto, para nosotros no fue un problema sino que fue un desafío que creemos que lo hemos resuelto con altura".

El enfermero contó que vivieron situaciones "ilógicas" como el descuento del presentismo a compañeros que se infectaron. "Estamos ahí porque decidimos cuidar la gente, pero también elegimos cuidar a nuestras familias y a nosotros y es importante que podamos llevar adelante esto con la conciencia de que realmente necesitamos ser protegidos de alguna manera y el reconocimiento es tener la tranquilidad de saber que tenemos los recursos necesarios para poder sostener a nuestras familias".

Contó que los recursos "que nos han provisto siempre han sido después de un reclamo y esas son cosas que van haciendo mecha: el pluriempleo, la sobrecarga de horario, el corte de las vacaciones... todo lo hemos hecho callados la boca, no hemos dicho nada. Hemos cumplido como corresponde con nuestra responsabilidad, pero no se puede cumplir más. Estas medidas son totalmente justificadas y de alguna forma nos van a dignificar por lo que realmente somos, trabajadores que cuidamos al resto de la población".

Rosa Chirino por su parte, pidió el acompañamiento de todos en esta instancia. "En junio empiezan las negociaciones paritarias y si no conseguimos este 16%, que es poco, nos va a costar mucho más a todos", dijo.