La terapia ocupacional en la Argentina es una profesión relativamente nueva, que llegó a fines de los años ´50 a partir del brote de poliomielitis, el que afectó a gran cantidad de niños dejándoles graves secuelas físicas.

La formación en aquel momento estuvo a cargo de terapistas ocupacionales de Inglaterra, y luego se fundó la Escuela Nacional de Terapia Ocupacional hasta que -finalmente- en el año 1967 se la incluyó dentro del ejercicio profesional de las prácticas médicas.

"Desde hace un tiempo nuestra profesión ha ido cobrando mayor reconocimiento en el área de la salud. De toras formas, y aprovechando la ocasión, creemos necesario continuar dando a conocer cuál es nuestro accionar profesional. La intervención del terapista ocupacional es muy amplia. No sólo podemos desempeñarnos en el ámbito sanitario, laboral y social, sino que abordamos todas las franjas etarias: desde bebés prematuros hasta adultos mayores (con o sin discapacidad física y/o neutral), ya que podemos desempeñarnos en todos los niveles de atención, es decir prevención y promoción de la salud, y atención primaria hasta cuaternaria" contaron Romina Fernández y Andrea Gómez, dos jóvenes terapistas ocupacionales de nuestra ciudad que hoy celebran su día.

"Abordamos a la persona de manera integral, teniendo en cuenta desde sus actividdes de la vida diaria -como alimentación, vestido, higiene- hasta su desempeño laboral en los adultos y el juego y el desempeño educativo en los más chicos, ya que consideramos a todas éstas como ocupaciones sin olvidar nunca sus motivaciones e intereses" explicó Andrea (34), quien hizo la primaria en la escuela 17 y el secundario en el Colegio Nacional.

"Nuestro objetivo primordial es fomentar la independencia de la persona, comprendiéndola como a un todo dentro de su entorno, sus habilidades e interacción con el medio. Aspiramos a mejorar su calidad de vida mediante la ocupación, utilizando y proponiendo actividades significativas para la persona con el fin de mantener, recuperar, incrementar, potenciar o desarrollar su rol dentro de los diferentes ámbitos (familiar, comunitario, educativo, etc.)", agregó Romina (31), quien con Nicolás Marino son padres de Piero (1 año y medio), y quien hiciera la primaria en la Escuela 1 y la secundaria en el Colegio San Antonio.

"También intervenimos evaluando y diseñando adaptaciones para que la persona se desempeñe de manera autónoma, previniendo el deterioro físico y/o neutral. Buscamos promover la motivación personal y lograr el bienestar de la persona" señalaron Romina y Andrea, quienes son licencias en terapia ocupacional recibidas en la Universidad de Mar del Plata en 2013.

"Luego de conocernos realizando una práctica clínica -aún como estudiantes- decidimos emprender juntas nuestro rol profesional y así comenzamos a trabajar en un consultorio privado al año siguiente. En ese tiempo recibimos gran apoyo de parte de nuestra colega licenciada en terapista ocupacional Mariana Lázaro, quien con su experiencia nos ayudó muchísimo brindándonos tiempo, conocimiento y facilitándonos material e información, por lo que esta es una buena oportunidad para agradecerle ese gran gesto hacia nosotras", contaron en la charla realizada en su consultorio, ubicado en España 3057.

"Actualmente continuamos nuestro camino juntas y, desde hace un tiempo, compartimos espacio junto a tres licenciadas en kinesiología (Roxana borgo, Paloma Venzi y Noelia Portillo). Allí nos dedicamos a la atención de niños y adultos con patología neurológica y traumatológica. En mi caso -dice Andrea- desde hace algunos años me encuentro también trabajando en CORPI abordando niños y adultos con patología neurológica. Allí tuve la oportu8nidad de comenzar mi formación en hidroterapia, otra herramienta con la que la terapista ocupacional cuenta dentro de su abordaje".

"Y en mi caso -señaló Romina- también trabajo en la atención de personas adultas con patología severa en el Centro de Día Ilusiones, desempeñándome como directora y teniendo a cargo la supervisión de un grupo de trabajo compuesto por diferentes profesionales como kinesiólogos, enfermeros, psicólogo, psicopedagoga, asistente social, terapistas ocupacionales y profesores de educación física".

"Desde hace algunos meses ambas nos encontramos realizando una pasantía en el servicio de rehabilitación del Hospial Municipal "Dr. Héctor Cura", atendiendo personas adults con patología neurológica, tanto en consultorio como en internación, ya que también el aporte desde TO en estadío agudo es de gran ayuda para la posterior recuperación de la persona. Allí nuestra intervención se dedica a los cuidades posturales, correcto posicionamiento en camna, indicaciones a familiares y/o acompañantes e intercambio de conocimientos con el accionar profesional con los médicos y enfermeros del sector, quienes también nos han brindado su apoyo y compromiso", explicaron.

"Hasta el momento esa parte de la población no contaba con la intervención de terapia ocupacional. Esta oportunidad también nos fue brindada por una colega, la licenciada Marcela Barbero, quien generosamente nos dio la posibilidad de ingresar allí para poder seguir aprendiendo y desempeñando nuestra profesión, por lo que también le agradecemos profundamente por su apoyo y dedicación para con nosotras. Es nuestra intención también poder continuar ofreciendo nuestro abordaje de terapista ocupacional en hidroterapia, que comenzamos en el año 2017 junto a otras colegas y el profesor de educación física Gustavo Monforte, quien nos ayudó en la formación brindándonos su conocimiento y experiencia en disferentes técnicas (watsu, acuafascia, ai chi, entre otras) a quien también le agradecemos por sus aportes y conocimientos" terminaro contando ambas profesionales.