La entidad que nuclea a los jueces y funcionarios había realizado recientemente un pedido de audiencia al gobernador Daniel Scioli para debatir un aumento salarial para el sector, que fue rechazada por parte de un funcionario del Ministerio de Trabajo con el argumento de que "el Poder Ejecutivo no tiene competencia para abordar una temática salarial de otro Poder del Estado".

Al respecto, en un duro comunicado, los magistrados cuestionaron "el deterioro" que han venido experimentando sus remuneraciones, al tiempo que insistieron en que el Colegio de Magistrados bonaerense es "la representación legítima de un Poder del Estado y su conducción es elegida y renovada mediante elecciones", lo que "carga a su mandato de un peso de representatividad que no puede ser desconocido ni minimizado".

Los magistrados buscan respaldar con este argumento su reclamo de participar de una mesa de diálogo que analice la política salarial del sector, ya que, según consideraron, hasta ahora el Ejecutivo ha fijado "sistemática y arbitrariamente" las recomposiciones salariales, sin atender a las demandas del Colegio como una entidad representativa y que "tiene un mandato reconocido".

El Colegio de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial bonaerense representa a los jueces y secretarios judiciales de la provincia, pero al no tener condición de gremio, no forma parte de la mesa de diálogo que analiza la pauta salarial anual, como pasa con otros estamentos.

Los magistrados consideraron "intolerable e inconstitucional" que el Poder Ejecutivo fije los salarios sin atender sus reclamos, y advirtieron que esa situación atenta contra "el principio de intangibilidad de los salarios de los magistrados y contra la jurisprudencia de la Corte Suprema de la Nación". El Poder Judicial tuvo para este año una suba salarial de entre el 24 y 25 por ciento en dos tramos, uno en abril, retroactivo a marzo, y otro será en septiembre.