París, 1957. Con 21 años recién cumplidos, Yves Saint-Laurent es nombrado para dirigir la prestigiosa casa de alta costura fundada por Christian Dior, recientemente fallecido. Durante su primer desfile triunfal, conoce a Pierre Bergé en un encuentro que va a cambiar su vida. Amantes y socios, los dos hombres crean dos años más tarde la sociedad Yves Saint-Laurent. A pesar de sus obsesiones y sus demonios interiores, Yves Saint-Laurent se prepara para revolucionar el mundo de la moda con su visión moderna e iconoclasta.