"¿Saben cuándo es el desalojo?", le preguntaron dos jóvenes mujeres a los agentes policiales que pasaban en un patrullero frente a la carpa ubicada en calle 11 a pocos metros de avenida De los Trabajadores, pero sobre la vereda del barrio Lourdes. La respuesta conseguida fue que debían hablar con su jefe. Pero en lo inmediato, ninguna autoridad judicial, policial y municipal supo definir hasta el cierre de esta edición si existía horario pautado para el desalojo compulsivo.

Son entre 20 y 30 personas, la mayoría de ellas mujeres jóvenes y niños, las que permanecen en la toma del predio ubicado entre calle 11, calle 5, Grimaldi y avenida De los Trabajadores. Esta última está cortada al tránsito desde hace varias semanas. Sin embargo, entre el fin de semana y ayer la mayoría de los usurpadores decidieron trasladar los refugios, carpas y gazebos desde el interior de los lotes hacia el otro lado de calle 11, desde donde sostienen el reclamo. Tal es así que en el cierre de la tarde de ayer había sólo dos carpas adentro del predio, de una de las que sacaron pertenencias y la llevaban al refugio armado del otro lado, donde, según estiman, no pueden ser desalojados.

Similar es la cantidad de agentes policiales de distintas dependencias de Olavarría que permanecen desde hace semanas también en el operativo que se montó en los alrededores del predio, para impedir que se radiquen más personas en el lugar y que se continúen las obras en los terrenos. En algunos sectores quedaron abiertos los cimientos, y en algunos de los ubicados en la esquina de Trabajadores y calle 11, llegaron a hacer el contrapiso de lo que fue proyectado como una habitación.

"Basta de injusticia social", "Por una tierra digna", "Empatía", son algunos de los carteles que se encuentran colgados en el ingreso a los lotes. Y según manifiestan los vecinos, el reclamo es directo al intendente Ezequiel Galli y los funcionarios municipales del área de Desarrollo Social. Ante la presencia de periodistas levantaron otros mensajes que indicaban: "Necesitamos un gobierno que lucha contra la pobreza, no contra... los pobres" y "No podría mirar a la cara a mis hijos y decirles que viven como viven porque yo no luche!".

"El Intendente se

debe a la gente"

"La situación es la misma, hasta el momento no ha cambiado nada", expresó ayer por la mañana Marina Ferreyra, una de las vecinas que encabeza la toma de tierras y que está en desacuerdo con lo resuelto la semana pasada en la sede del Palacio "San Martín". Quien recorra la calle 11 desde Grimaldi hasta De los Trabajadores y dialogue con los vecinos va a encontrar que los que están en una punta firmaron el acta y decidieron levantar la usurpación; y los del otro sector reclamaron que se tendría que haber consultado a todos los vecinos. Con los ánimos enfrentados, todos esperan la medida que dicte el Juzgado de Garantías.

"La gente está esperando respuestas concretas, una solución concreta, que alguien baje a darle algún tipo de solución a este problema que ya lleva varios días, y el papel que se firmó el jueves en la asamblea no sé si tendrá algún efecto porque no tiene ningún tipo de sello y solamente las firmas. No todos tuvieron voz y voto para hablar, entraron cuatro personas, salieron con que ‘vamos hacer esto y esto’ y después quedó todo así", expuso Ferreyra a 98Pop.

José Luis, uno de los cuatro referentes que ingresó a esta reunión con autoridades municipales, judiciales, provinciales y de la Defensoría del Pueblo, fue quien ayer refirió que no iba a retirar la carpa del predio. "Yo les dije que estaba en contra, se tendría que haber consultado a todos", comentó con enojo a EL POPULAR.

"Están amedrentando con el tema de las causas judiciales, tratando de desestabilizar a la gente, metiéndole miedo, presión. Esa es la solución que ellos están teniendo, están dilatando la situación porque no saben cómo hacer con esto", acusó Ferreyra.

La mujer agregó que "hasta que no venga una orden del juez firmado, un papel escrito y firmado que lo avale un juez, no se va a desalojar. El desalojo va a ser pacífico en caso de que esté la orden de un juez, que también el juez dé la garantía y avale que la gente acá no va a ser golpeada ni lastimada, que nosotros no tenemos armas ni nada. Pedimos que el juez que dé la orden de desalojo se haga presente en el lugar y vea que sea de forma pacífica".

Ferreyra solicitó finalmente que haya "diálogo cara a cara con la gente como corresponde, porque ellos se deben a las personas, se deben a la gente, o porque somos personas humildes, ¿no van a bajar del caballo de la soberbia para hablar con nosotros? Creo que el Intendente primero se debe a la gente, tiene que hacer frente a esta situación, no tirar la pelota unos a otros y que nadie se hace cargo de lo que está pasando acá".