Según su testimonio al diario español El Mundo: «Desayunamos mal. Los grandes protagonistas de nuestra primera comida del día son los azúcares, cuando este papel debería de estar reservado a las proteínas, las grandes ausentes en esta ingesta». Con un exceso calórico y los picos de glucemia en sangre, es normal pasar el día con la sensación de hambre y «picando». Esto genera un desequilibrio de hormonas que, al final, llevará a aumentar de peso.

El primer consejo que da en el artículo es: «eliminar el café, ya que es muy excitante». También cambiar el pan o las galletas del desayuno con hidratos por proteínas como huevos o fetas de jamón magro». Su hipótesis afirma que de esta forma «los picos de insulina no serán tan bruscos y, entonces, se llegará al almuerzo con menos hambre». 

Además, el experto explicó cómo el cuerpo utiliza las proteínas y los hidratos de carbono mediante la siguiente analogía: «Imaginemos que queremos encender una chimenea. Los palos y las hojas funcionarán muy bien. Conseguiremos un fuego muy rápido y explosivo, pero se quemará muy rápidamente, por lo que tendremos que seguir añadiendo palos. Así funcionan los carbohidratos en nuestro cuerpo. Sin embargo, un tronco (refiriéndose a las proteínas), a pesar de tardar más en arder, su energía será más constante, duradera y sostenible».

El estrés aumenta los niveles de cortisol, y es por ello, que a la hora de perder peso presenta un papel fundamental. Este aumento «impide el correcto funcionamiento de la grelina y la leptina, hormonas que se producen en el sistema digestivo y están implicadas en la disolución de las grasas».

Finalmente, FUNIBER patrocina diversos programas de estudios como la Maestría Internacional en Nutrición y Dietética.

 Fuente: Los alimentos que conviene desterrar del desayuno si se busca adelgazar.