Redondeando, parece que en los perros machos existe un mito de la no castración y haciendo una interpretación un poco psicológica del tema, daría la impresión, dentro de los mecanismos de proyección, gracias al genio Freud, quien nos dio herramientas interpretativas, y es conocimiento de la gente; se siente una sensación de castración propia en cuanto al hombre se refiere.   

Volviendo a los perros, con la castración, evitaríamos la multiplicación irresponsable y también las enfermedades de índole prostático y testiculares, y de esto, que la función hace al órgano; órgano que no se usa se enferma o atrofia. 

Todo este tema, llevado al fenómeno humano, de cada 100 ligamientos de trompas, hay 1 o 2% de vasectomías.

Conclusión; dejémonos de falso machismo, pongámonos en un plano de igualdad con la parte femenina, es decir vasectomía, es un método sencillo, de 20 minutos de intervención quirúrgica, que no significa castración, porque se conservan los testículos, con la función de secreción hormonal y de espermas; lo único que es interrumpido es el tránsito de estos últimos, lo mismo que pasa con los óvulos  en el ligamiento de trompas. 

Reflexionen y sean responsables.

Saludos: Dr. Daniel Fanesi