Las autoridades del Consejo Escolar de General La Madrid brindaron ayer una conferencia de prensa en la que se explicaron los motivos que obligó suspender, por tiempo indeterminado, las clases en varios establecimientos educativos rurales. Además subrayaron que "era necesario atender la problemática" y "dar una solución "de calidad y duradera".

Desde el lunes se definió el cierre preventivo de escuelas y jardines en Las Martinetas, Líbano, también en los parajes y ahora se continúan inspeccionando otros establecimientos.

"Decidimos realizar un diagnóstico certero y profundo que nos arroje cuál es la situación real", comenzó diciendo la titular del Cuerpo educativo, Julieta Olhasso, a la vez que informó que las fallas aparecieron mientras se estaban haciendo los controles de hermeticidad en la escuela de Pontaut.

Comunicada la situación a las autoridades provinciales, se definió hacer una inspección en todos los establecimientos rurales del Partido. "Comenzamos a controlar las que tienen provisión de gas por zeppelin", ahondó Olhasso a la vez que detalló que hasta el momento se ha hecho la verificación en la mitad de los establecimientos y han detectado fallas "algunas leves y otras más severas en la mitad de las que se hicieron los controles".

Desde el Consejo Escolar se detalló que los dos gasistas habilitados por el Organismo ya realizaron la revisión en las escuelas y JIRIM de los parajes (EP N° 13, 15, 16, 19 y 20), también la EP N° 8, la Técnica y los establecimientos de Las Martinetas y Líbano -en ambos casos los jardines, las primarias y los secundarios-.

Tras las inspecciones se decidió suspender provisoriamente las actividades en ambas localidades y varios de los establecimientos de los campos.

"Queremos cumplir con la reglamentación para que la seguridad esté garantizada al mínimo detalle", insistió Julieta Olhasso y aclaró que la medida que se tomó "se hace preventivamente".

"En la mayoría hay detalles, algunos son más complejos y otros son simples pero decidimos inhabilitar el funcionamiento hasta tanto se solucione la problemática", sumó Oscar Bianchi y sostuvo que "en nuestro distrito hay establecimientos centenarios, con instalaciones de gas que tienen mucho tiempo y a las cuales no se les había hecho un control tan exhaustivo como el que se está haciendo ahora".

Por su lado José María Aspiroz indicó que "no hay fecha para que vuelvan las clases" y apuntó: "hacer esto es atacar seriamente una problemática que necesita una solución de fondo".

Wanda Villareal detalló que una vez que finalice el informe de los especialistas (que sería en las próximas horas) se hará el pedido de recursos a la Dirección General de Escuelas "porque con el fondo compensador (N de R: fondos propios del Consejo) se va a hacer imposible afrontar toda la inversión".

"En algún momento había que tomar esta decisión para poder darle seguridad de todos. Deseamos dar clases pero entendemos que es prioritario asegurar que no haya inconvenientes con el gas porque es peligroso. Ahora tenemos que trabajar para dar una respuesta definitiva, de calidad y duradera", concluyó Julieta Olhasso.

Continuidad pedagógica asegurada

Por su parte la inspectora distrital, Natalia Barrutia, mencionó que "suspender las clases en estas instituciones radica en el marco del cuidado que debemos tener con los alumnos, los docentes y auxiliares" y subrayó que "la continuidad pedagógica está asegurada". En ese sentido se explayó que cada año, cada establecimiento, elabora un plan de contingencia para situaciones en las que no se pueda brindar clases con normalidad.

"Todos los docentes se reunieron con las familias y entregaron actividades y propuestas para que los alumnos los puedan completar con sus padres", contó la inspectora.