La pugna por estos terrenos es protagonizada por la familia del concejal Juan Sánchez, por un lado; y por los miembros de la empresa de transporte WG SRL, por el otro. Desde ambas partes aseguraron ser los dueños legítimos de estos lotes, pero para la familia Sánchez se trató de un intento de usurpación, algo que fue rechazado por el abogado de la otra parte.

De acuerdo con los diversos relatos que se conocieron ayer por la mañana, entre las 5.30 y las 6 de la mañana irrumpieron en el predio cuatro colectivos de la empresa WG Transportes, cuyo propietario es Walter Gernetti, responsable además de la concesionaria del transporte público urbano de la ciudad, Tu Bus. La situación fue alertada por miembros de la familia Sánchez, quienes desde hace décadas se encuentran ubicados en este lugar.

"Nos invaden a las 5.30. Rompieron todos los alambrados, la cartelería colocada propiedad de la familia Sánchez, los arcos de fútbol fueron arrancados. Ingresaron al predio con los colectivos de la empresa WG y uno de los micros era manejado por Walter Gernetti", expuso a EL POPULAR Ricardo Sánchez. Fueron cuatro los vehículos que quedaron en medio del terreno, y según su testimonio el objetivo era instalar un gazebo para iniciar obras.

Al percatarse de esta situación, Sánchez indicó que los filmó "e invito a que se retire del lugar". Como respuesta recibió "un golpe de puño en la cara que no lo veo y se me fue el mundo de alrededor. Cuando recobro el conocimiento veo que la intención era quitarme el celular" con el que estaba grabando. El protagonista expuso: "Tenemos terrenos de más de 30 años con toda la documentación pertinente y boleto de compraventa en los años ‘90".

A la par, en el momento en que los colectivos ingresaban el predio un hermano de Ricardo, Enrique "Quique" Sánchez, habría intentado detenerlos interponiéndose en su camino. De acuerdo con lo que fue denunciado horas más tarde en la comisaría Segunda, habría sido atropellado más de una vez, por lo que el ex secretario general de Luz y Fuerza debió ser hospitalizado. Su familia indicó que estaba internado "fuera de peligro. Tiene la cara estropeada".

En esta misma línea refirió que para irrumpir en el predio fueron contratados "dos matones de una empresa de seguridad". Fuentes oficiales confirmaron que la familia Sánchez radicó una denuncia por daños, lesiones y robo, en este último caso por el celular de Ricardo, que no fue recuperado.

"Son de la empresa"

Mientras que la familia Sánchez asegura ser propietaria legítima de estos lotes desde hace 30 años, desde WG Transportes aclararon que estos terrenos son "de la empresa". En comunicación telefónica con este medio, Walter Gernetti refirió que "tenemos la escritura pública, hay sucesiones de por medio. Las propiedades son de la empresa, son de WG SRL, están escrituradas con escritura pública desde hace tiempo, no desde ahora".

Gernetti agregó que, a su entender, "esta gente dice tener la posesión porque hace 30 años lo usaban para jugar partidos de fútbol". Finalmente indicó, acerca de la denuncia que lo ubica como uno de los agresores del episodio ocurrido ayer por la mañana, que se encontraba en ese momento en Capital Federal.

En los mismos términos se refirió el representante legal de WG Transportes, el doctor Oscar Palahy. "La empresa compró unos terrenos, tienen sus escrituras, están inscriptas en el registro, se hizo como corresponde. Ya habíamos preparado para empezar la obra. Vamos a entrar a los terrenos y apareció esta gente a agredir, se empezaron a meter delante de los colectivos cuando iban entrando. Yo llegué tarde y estaba la policía, estaba todo el lío entre la gente".

Palahy explicó que desde la empresa iban a colocar en ese predio tanques de combustible. El terreno es lindero a la sede que tiene la firma sobre avenida Circunvalación. "Se generó toda una situación de violencia pero la empresa tiene escritura, no intentó hacer algo que no le correspondía", refirió el abogado, quien descartó además que lo sucedido haya sido un intento de usurpación.

El abogado planteó que en estos lotes "no hay ninguna construcción hecha, no hay nadie que haya estado viviendo, que haya estado teniendo ni siquiera la posesión de terrenos. Acá eran terrenos, hay árboles, pasto. Ellos dicen que hay una cancha de pádel, una cancha de fútbol, pero si vos venís y mirás no hay nada, son terrenos y nada más".

Palahy agregó que "tenemos la escritura de los titulares del terreno, hay dos sucesiones que implican publicidad, hay una persona que compra y luego le termina vendiendo a Walter. Está todo bien, como corresponde. Y si fue engañado fue engañado muy bien. Ellos (por la familia Sánchez) no acreditan ningún título que ellos puedan tener, ninguna propiedad. Dicen que lo usaban, tienen una quinta al lado, vienen en el verano, la usan".

El abogado expuso que la semana pasada "tuvimos que hacer una denuncia por amenazas, Walter iba a bajar los tanques y en ese momento también llegó la policía, puso paños fríos".

La instancia legal

Con el objetivo de destrabar el conflicto, se acercaron al lugar los jefes y subjefes de la comisaría Segunda, comisario Darío Bonillo y subcomisario Martín Cortez, respectivamente; la fiscal María Paula Serrano, junto a instructores judiciales de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 4 y otros agentes policiales.

En principio desde la fiscalía se ordenó quitar los micros del terreno, para garantizar que el personal de Policía Científica pudiera realizar sus trabajos de manera adecuada. Además de tomar intervención en el caso por las denuncias presentadas por ambas partes entre la semana pasada y ayer, fuentes judiciales indicaron que se avanzará en determinar si hubo "irrupción violenta" o intento de usurpación en el predio, más allá de quién acredite ser el propietario legítimo de las tierras.

De manera paralela se deberá dirimir en el área civil precisamente quiénes son los dueños de los lotes. Mientras que la familia Sánchez asegura que cuenta con un boleto que data del año 1991, desde la empresa de transportes aducen que la compra se realizó de manera reciente. Para el doctor Palahy, "acá delito penal no hay, es una cuestión civil de discutir quién es el que tiene derecho a la propiedad. Ellos invocan el uso de años como si alguien pudiera poseerlo por el transcurso del tiempo. Son dos terrenos, no tienen nada, nadie estaba viviendo, no hay una construcción, no hay nada. Eso que ellos invocan es bastante frágil".