Elecciones primarias en Argentina: Cambios en el escenario político y el papel de los gobernadores e intendentes
Las elecciones primarias en Argentina han modificado el escenario político del país, con impacto en la conformación legislativa, destacando el papel clave de los gobernadores e intendentes. Javier Milei ha ganado en 16 jurisdicciones y Juntos por el Cambio en tres, lo que indica un cambio en la correlación de fuerzas.
Resultados electorales en Argentina
En las recientes elecciones, Sergio Massa ha logrado revertir los resultados en ocho de las 19 provincias que Unión por la Patria había perdido en las elecciones primarias de agosto. Este resultado amplio y sorprendente ha superado las expectativas generadas por las encuestas y las estrategias de campaña.
Con más del 98,51% de las mesas escrutadas, el ministro de Economía ha recuperado las provincias de Tucumán, La Rioja, Chaco, La Pampa, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Estas son seis provincias de las 16 que había ganado Milei en las PASO. Además, ha vencido a Patricia Bullrich en Corrientes y Entre Ríos, donde Juntos por el Cambio había ganado anteriormente. La exministra de Seguridad solo ha conseguido una victoria en la Ciudad de Buenos Aires.
Uno de los momentos clave de la elección ha sido la provincia de Buenos Aires, donde Massa ha logrado una ventaja de más de 17 puntos sobre Milei. Además, el hecho de haber revertido los resultados en ocho provincias, incluyendo Tucumán, el quinto distrito con mayor cantidad de electores en todo el país, ha sido determinante para tomar la delantera y dejar a Bullrich fuera de la segunda vuelta.
El papel crucial de los gobernadores e intendentes
Tras la contundente derrota del oficialismo en las PASO, se ha puesto en tela de juicio el papel de los gobernadores e intendentes peronistas, acusándolos de haber jugado a favor del corte de boleta y generando malestar por el desdoblamiento de las elecciones en sus propios territorios para evitar ser arrastrados por el resultado de la elección presidencial.
Tras el primer impacto y las críticas recibidas, el espacio UxP ha comenzado a reorganizarse. Diversos referentes del peronismo, desde Juan Grabois hasta los principales representantes de La Cámpora y del kirchnerismo duro, así como los gremios y las organizaciones sociales, han decidido alinearse detrás de Massa en un proceso de reordenamiento típico del peronismo en momentos de crisis política. Sin embargo, no siempre ha dado buenos resultados.
En el corazón del peronismo, se creía firmemente que en esta elección los votos en la provincia de Buenos Aires se traccionarían desde abajo hacia arriba, es decir, desde las intendencias hasta la presidencia. Y los resultados de este domingo han confirmado esa creencia. Se combinó el trabajo militante casa por casa con el llamado de los jefes comunales a votar la boleta completa, algo que no había ocurrido en las primarias.
Una situación similar se dio en las provincias que desdoblaron elecciones, con un resultado poco favorable para el oficialismo. El mensaje de Massa fue claro: salir a militar la boleta completa casa por casa.
El ministro candidato logró revertir el resultado en ocho provincias, lo que significó una recuperación de poco menos de un millón de votos para UxP. Es importante destacar que solo en la provincia de Buenos Aires, se recuperaron 1,4 millones de votos, distribuidos entre la primera y la tercera sección electoral. Este doble triunfo fue determinante para definir la elección del pasado domingo, ya que UxP logró recuperar casi 3 millones de votos en comparación con las PASO.
Nuevo escenario político para la Argentina
El año en curso quedará marcado como uno de los momentos más desconcertantes para la política argentina desde el regreso de la democracia. La irrupción de Javier Milei ha sacudido el tablero de una manera inesperada, dejando un escenario político atípico para el país.
Milei, reconocido economista y nuevo referente político, ha logrado captar la atención de la ciudadanía con sus propuestas liberales y su estilo provocador. Su crecimiento en las encuestas ha sido vertiginoso y ha generado una polarización en el electorado.
Esta situación ha traído consigo un gran cambio en la dinámica política argentina. Los partidos tradicionales se han visto obligados a replantear sus estrategias y adaptarse a esta nueva realidad. La incertidumbre y el desconcierto han dominado el escenario político, generando debates intensos y reconfiguraciones en el mapa electoral.
El fenómeno Milei ha evidenciado un descontento profundo de la sociedad argentina con las políticas tradicionales y ha abierto el debate sobre nuevas ideas y enfoques que antes no tenían cabida en el espectro político. Los ciudadanos demandan cambios y buscan alternativas a los problemas que aquejan al país.
En este contexto, los partidos políticos se encuentran frente a un desafío sin precedentes. Deben repensar sus estrategias, conectar con la ciudadanía y presentar propuestas que respondan a las demandas actuales. La escena política se ha vuelto más dinámica y competitiva, y los políticos deben adaptarse a esta nueva realidad.
Es difícil predecir cómo se desarrollará este nuevo escenario político en la Argentina. Lo único seguro es que el país está viviendo un momento de profundos cambios y que los actores políticos deberán estar a la altura de las circunstancias para enfrentar los desafíos que se presenten.
A lo largo del año, las elecciones provinciales que comenzaron en febrero fueron pintando el mapa político de amarillo, con un Juntos por el Cambio que logró dar el batacazo en provincias clave del corazón productivo del país, como Santa Fe, San Luis, San Juan, Chaco, Santa Cruz, Chubut y Entre Ríos, y logró retener Mendoza y Jujuy, mientras que la Ciudad de Buenos Aires se definirá en el escrutinio definitivo si va al balotaje o no.
Así, el próximo presidente contará con 11 provincias gobernadas por Juntos por el Cambio; cuatro por fuerzas provinciales (Salta, Misiones, Córdoba y Río Negro), y diez por Unión por la Patria. En el Congreso, contrario a lo que se creía en la previa a este domingo, el oficialismo retuvo la mayoría en la Cámara de Diputados y en el Senado. .