sergio@mtcd.com.ar / @magallanes_ser

Hasta ahora el sistema educativo imparte la asignatura de informática desde el punto de vista de usuario, es decir se enseña a los estudiantes las nociones básicas para utilizar una PC, algo que la mayoría ya traen aprendido desde "la casa", y programas de productividad, como procesadores de texto, planillas de cálculos. Un manejo esencial de los navegadores y algunas herramientas web son más que suficiente para rellenar el programa educativo en lo que concierne a tecnología. Sin embargo, el progreso acelerado de todo lo que se refiere a Internet y la programación en general está creando nuevas necesidades.

Actualmente hay un movimiento global liderado principalmente por Code.org y CodeAcademy que promueve la enseñanza de la programación informática en las escuelas, según estas organizaciones no sirve de nada que te enseñen unas herramientas como "Word" que habrán desaparecido o habrán cambiado mucho cuando los estudiantes se enfrentes a la vida laboral, ya que cualquier nueva aplicación, si está bien diseñada, no se tarda en aprender. En la actualidad se está poniendo el foco en las excelentes posibilidades laborales que se presentaran en un futuro cercano para los jóvenes que sepan programar.

El aprendizaje de lenguajes de programación puede comenzar desde edades muy tempranas, incluso al mismo tiempo que los niños aprenden a leer, con herramientas cada vez más económicas y sencillas, e incluso apoyando el desarrollo en el aprendizaje de otras áreas. Aprender desde chicos cómo funciona una "computadora" y cómo podemos comunicarnos con ella permite que los niños comprendan mucho más de la realidad que les rodea, y que estén más preparados para aportar valor en la sociedad hoy altamente tecnologizada.

Ya no basta sólo con enseñar a los alumnos a ser usuarios sino que cada vez es más útil que aprendan a ser creadores. Los niños que hoy están en las escuelas tienen la oportunidad de mirar la tecnología desde un punto de vista más profundo que la mayoría de las personas; la creatividad es propulsada por el reto de crear un programa que funcione e incluso que se diferencie de otros ya existentes, el desarrollo de un pensamiento abstracto y computacional es uno de los resultados que generan programar.

Las herramientas que utilizan los niños generalmente no tienen coste alguno pues se trata de software libre, quizás una de los más populares es Scratch desarrollado por el MIT, que permite crear animaciones sencillas. A través de una serie de indicaciones básicas el usuario puede configurar su propio escenario, llegando a crear un videojuego. El desarrollo ha puesto especial hincapié en que todo sea "divertido" y que gire en torno a los contenidos multimedia. Es como una versión para el siglo XXI de la tortuga triangular de Logo.

El proyecto Scratch tiene como principal objetivo llegar a los niños en forma de material docente, proporcionando para ello todo tipo de ayudas a profesores para que se puedan usar en clase, como manuales, fichas, soporte, una página de educadores o una comunidad online especialmente dedicada a que todo sea mucho más fácil.