La labor educativa en contexto de encierro finalizó para Elizabet Bórmida. Fue la primera mujer que ingresó en el año 1982 para trabajar con los internos enmarcados en el artículo Nº 18. Es reconocido su desempeño por ofrecer oportunidades de cambio a los privados de la libertad y por implantar valores a partir del trabajo en equipo con personas que se acercaron a la escuela para ofrecer cursos ad honorem como sucedió con los cursos de vocalización, telar y yoga, así como otras actividades que aportaron herramientas para que el interno pueda insertarse en la sociedad, como es el caso del taller de marroquinería.

La ceremonia estuvo cargada de momentos divertidos y emotivos. Las palabras de despedida estuvieron a cargo de Stella Martins, quien hizo referencia a recuerdos y luchas ganadas. "No descansó hasta lograr su objetivo que fue y es reafirmar la importancia de la educación como herramienta para el mejoramiento de la calidad de vida de los y las estudiantes. Ya con docentes dando clases en los pabellones tuvo en su mente tener un edificio propio para la escuela. En octubre del 2000 impulsó el primer Congreso Nacional de Educación en las Cárceles ‘Educar tras los muros’. Elizabet Bórmida: sin filtro, revolucionaria, audaz, tenaz y compañera. No serás prócer pero has hecho historia", cerró con emoción en los ojos la docente.

A lo largo de estos años el plantel de docentes educó a los estudiantes en todas sus aristas. Desde ahí es que para destacar las actitudes positivas de los docentes no hay mejor referente que los alumnos mismos a través de sus representaciones artísticas. Así fue que en la ceremonia los alumnos del turno mañana presentaron la obra de teatro "La Penitencia", los alumnos del turno intermedio bailaron una chacarera y alumnos del turno mañana e intermedio presentaron una danza contemporánea con el tema Latinoamérica del grupo Calle 13.

La jefatura de la Unidad N º2 y el cuerpo docente valoraron los años de servicio docente y compromiso con la educación.

Acto en la Unidad 38

Por otra parte, la Escuela 701 con sede en la Unidad 38, llevó a cabo el acto por el Día del Maestro en esa dependencia. En una sencilla ceremonia conducida por la docente Marta Montenegro, que contó con la presencia del equipo docente, alumnos y personal penitenciario, las banderas Nacional y Provincial dieron color a las estrofas del Himno Nacional y el Himno a Sarmiento la Directora del establecimiento educativo, Mariel Lasso, en sus palabras recordó algunos hechos de la vida de Sarmiento y destacó "a pesar de que existen muchas controversias en torno a la figura de Sarmiento, es interesante insistir en su valoración de la educación como agente transformador de un país. Entendía que el fortalecimiento de una identidad desde la escuela era la manera de reunir una sociedad dividida culturalmente, y si bien eso implicó la desvalorización de ciertas particularidades, no estaba equivocado" y concluyó "como maestros en contextos de encierro estamos atravesados por las normas pedagógicas educativas y por las normas reglamentarias de un establecimiento carcelario. En esta tensión nos reconocemos como sujetos críticamente reflexivos que fundamos nuestra práctica con el objetivo de colaborar en la efectivización del derecho a la educación de nuestros alumnos".