Kicillof: "El mundo cerró todo cuando subieron los contagios, no es una receta bonaerense"
El gobernador Axel Kicillof insistió este jueves en la necesidad de tomar medidas más estrictas y, en ese marco, sostuvo que "cuando subieron los contagios, el mundo cerró todo" al señalar que ese tipo de restricciones no parten de "una receta bonaerense".
Las autoridades bonaerenses vienen presionando con la necesidad de realizar un cierre de actividades por 15 días bajo la premisa de que estabilizar los contagios no es suficiente para generar alivio en el sistema de salud.
"Ya nos tienen un poco podrido con estas cosas de amesetar la curva. No nos podemos resignar a que la gente se contagie", dijo Kicillof y enfatizó en la necesidad "de reducir la velocidad de contagio, no sólo de aplanar la curva" al remarcar que "30 mil casos, significa una cantidad de enfermos graves y fallecidos".
"Hay que volver a tierra firme y dejar de estar a 6.000 metros de altura", enfatizó. El mandatario bonaerense formuló declaraciones a la prensa al recorrer un vacunatorio instalado en el Parque de la Cervecería Quilmes, junto a la intendenta local Mayra Mendoza, y el viceministro de Salud, Nicolás Kreplak.
Allí, destacó la importancia del encuentro que ayer mantuvieron distintos gobernadores con el presidente Alberto Fernández y contó que la ministra de Salud, Carla Vizzotti, les explicó "de manera muy cruda que la situación es muy preocupante".
Pese a la recomposición del diálogo con la Ciudad, Kicillof volvió a apuntar contra la gestión sanitaria de Horacio Rodríguez Larreta: "En la Ciudad de Buenos Aires ya desbordó", reprochó Axel Kicillof. "Desbordó obviamente una parte hacia la provincia de Buenos Aires. Nosotros encantados y dispuestos de recibir a todo aquel que necesita ayuda, pero tiene límite", agregó.
"El otro día escuchaba a Quirós (Fernán, ministro de Salud porteño) que tenían más del 80% de ocupación de camas. Más allá de la discusión del número, es importante que reconozcan eso porque significa que está lleno y no se puede sostener con ese nivel de atención", argumentó el gobernador bonaerense.
En ese marco, planteó que "CABA tiene el sistema más robusto de la Argentina, con 33 hospitales municipales que antes eran nacionales" y se preguntó: "Si eso está colmado, ¿qué le queda al resto el país?".
"Nosotros en la provincia triplicamos la cantidad de camas, y tenemos un margen. La curva está un poco estabilizada, pero hay que bajarla", manifestó el gobernador e indicó que se debe detener el paso del virus, también, porque "los trabajadores de la salud no dan más".
Luego, expuso que las medidas "oportunas" de restricción que aplicó el presidente Alberto Fernández, "lograron que no se vivan imágenes dantescas como se vieron en el resto del mundo y permitieron reducir la velocidad de aumento".
"Ahora hace falta bajar la curva, lo dijo hasta el propio jefe de Gobierno (porteño), Horacio Rodríguez Larreta", expresó Kicillof y apuntó que desde el Gobierno se busca "coordinar con la Ciudad".
"Hay que bajar la curva, no que deje de crecer; 30 mil contagios son muchísimos muertos. No podemos festejar que paró de subir. Hay que bajarla con menos contactos y menos movilidad porque el virus se contagia persona a persona", indicó.
Finalmente, planteó que observa una "discusión malintencionada sobre la cuestión de la libertad fomentada desde algunos medios y una parte de la oposición instando a que la gente no se cuide" cuando, a su modo de ver, "la libertad te la da la vacuna".
El gobernador encabezará desde el mediodía una reunión con los 135 intendentes de la Provincia para avanzar en el aval sobre nuevas restricciones.
El encuentro virtual se desarrollará por videoconferencia y el mandatario provincial estará acompañado en la reunión por su jefe de Gabinete, Carlos Bianco, y por el ministro de Salud, Daniel Gollan. (DIB)