El jaguar, símbolo de poder y equilibrio natural en América Latina, enfrenta una crisis sin precedentes en Bolivia. La caza ilegal, el tráfico de colmillos hacia Asia, la deforestación y los incendios forestales amenazan su existencia. Con menos de 170,000 jaguares en el mundo, su protección se ha convertido en una causa urgente para la biodiversidad y la identidad cultural de las comunidades amazónicas.

En este contexto, la campaña de impacto del documental “Tigre Gente”, dirigida por Elizabeth Unger, ha regresado a Bolivia con el propósito de empoderar a las comunidades locales para liderar acciones de conservación. Proyecciones, talleres de periodismo ambiental y “artivismo” han sido implementados en regiones como Santa Cruz, Beni y La Paz, donde la lucha contra el tráfico ilegal de jaguares es una prioridad.

Un documental que inspira acción

Estrenado en 2022, “Tigre Gente” va más allá de narrar el comercio ilegal de partes de jaguar; es un llamado a la acción.

Salvar al jaguar, espíritu de la selva: Bolivia se moviliza por la conservación del felino

 Liderado por el guardaparque boliviano Marcos Uzquiano, el documental destaca el impacto del tráfico ilegal en el Parque Nacional Madidi, uno de los puntos más biodiversos del planeta. Uzquiano, quien ha incautado más de 180 colmillos y pieles de jaguar, enfatiza: “El jaguar es fuerza, vida, mito. Es parte de mi familia”.

Salvar al jaguar, espíritu de la selva: Bolivia se moviliza por la conservación del felino

El impacto de los incendios forestales

Bolivia también enfrenta una crisis ambiental histórica. En 2023, incendios forestales devastaron más de 10 millones de hectáreas de selva, principalmente en la Amazonía y la Chiquitanía. Según expertos, esta pérdida equivale a 1,800 millones de árboles y ha causado la muerte de millones de animales, afectando gravemente el equilibrio ecológico.

Día Internacional del Jaguar: un llamado urgente

El 29 de noviembre, Día Internacional del Jaguar, destaca la importancia de este superdepredador para la salud de los ecosistemas. Proyectos como “Tigre Gente” demuestran que la colaboración comunitaria es clave para combatir amenazas como el tráfico ilegal y la deforestación.

Proteger al jaguar no solo asegura la biodiversidad de la Amazonía, sino que también fortalece la conexión cultural con este espíritu de la selva. Con acciones concretas, Bolivia aún tiene la oportunidad de salvar a este majestuoso felino y preservar el equilibrio natural del que dependen tantas vidas.

Salvar al jaguar, espíritu de la selva: Bolivia se moviliza por la conservación del felino