El vocero de Unidad Nacional (UN), Marco Fuentes, desahució el diálogo convocado por el Gobierno de Luis Arce, asegurando que se trata de una reunión sin sentido, donde no se tomará en cuenta la opinión de los sectores productivos ni se plantearán soluciones reales a la crisis de carburantes y la falta de divisas en el país.

Fuentes afirmó que el Ejecutivo carece de una lectura clara sobre la realidad económica del país y que la convocatoria responde a un intento de aparentar apertura al diálogo, sin intenciones reales de escuchar propuestas de los sectores afectados.

“Este es un diálogo de sordos, donde el Gobierno solo busca justificarse y no asumir su responsabilidad en la crisis económica y de hidrocarburos que atraviesa Bolivia”, manifestó el vocero de UN.

Además, Fuentes confirmó que el líder de Unidad Nacional, Samuel Doria Medina, no asistirá al encuentro, al considerar que será una pérdida de tiempo. Según el vocero, el Gobierno no tiene capacidad de dar respuestas a los problemas estructurales que enfrenta el país, como la escasez de carburantes, la falta de dólares y la incertidumbre económica que afecta a la población.

Desde la oposición, distintos sectores han cuestionado la convocatoria del Ejecutivo, exigiendo que el diálogo incluya a actores clave de la economía boliviana, como el sector empresarial, los productores y el transporte pesado.

“No se puede seguir improvisando. El Gobierno debe reconocer su incapacidad y permitir que se adopten medidas estructurales reales para salir de la crisis”, concluyó Fuentes.

El encuentro político convocado por el Gobierno sigue generando rechazo entre la oposición, que exige soluciones concretas y mayor inclusión de sectores afectados por la crisis.