Esta semana fuimos invitados a participar de un debate de candidatos a intendentes en General la Madrid. Luego de analizarlo, decidimos no formar parte del mismo. El motivo que fundamenta esta decisión tiene que ver con los tiempos y las formas de organización. Un debate de cara a una elección de esta magnitud debe perseguir objetivos claros: conocer las propuestas de cada espacio político, nutrir de ideas al electorado, evitando transformar al evento en un mero acto de campaña proselitista, donde cada uno -como ha ocurrido en otros debates en nuestro país- intenta sacar tajada, cayendo en la descalificación y rompiendo con lo que en estos ocho años hemos intentado construir desde la gestión: el diálogo y el respeto con todos los espacios políticos, sindicatos y funcionarios de nuestro distrito, provincia y nación.  Estando a tres semanas de las elecciones creemos que no están dadas las condiciones para organizar un debate con la seriedad, profundidad y altura que se merecen nuestros vecinos. En las elecciones legislativas de 2021, la propuesta de debate a candidatos se inició durante los primeros días de julio, concretándose el evento el 4 de noviembre. Con lo cual hubo cuatro meses para diseñar el evento, nutriéndolo de una estructura seria, para construir un hecho que pudo sumar una mirada al electorado. La propuesta que recibimos esta semana tiene, de origen, un mal de estos tiempos: la improvisación y la falta de seriedad y planificación. Por respeto a nuestros vecinos y a la democracia, creemos conveniente no participar del mismo. Nuestras ideas, propuestas y lo que queremos para La Madrid han sido expresadas -y se expresan- todos los días, a lo largo de estos casi ocho años de gestión.Sin más, saludamos a los espacios políticos y a los vecinos, invitándolos a llevar en mano las propuestas y recibir de estos lo que necesitan y desean para La Madrid.