El doctor Leandro Despouy es un prestigioso abogado, docente, preside la Auditoría General de la Nación y es un hombre histórico de la Unión Cívica Radical. Debido a esto es una palabra autorizada para analizar los temas que la agenda política marca por estas horas.

El domingo mantuvo una reunión con Alejandro Lecointre y Martín Randazzo, presidente y convencional, respectivamente, de la UCR lamatritense. También se encontró con el senador Horacio López y otros referentes del partido.

Para el titular de la AGN, la figura del funcionario kirchnerista ha sido polémica desde hace mucho tiempo. Recuerda que en el libro del periodista Carlos Gabetta, "La encrucijada Argentina, República o país mafioso", se traza el papel que ha cumplido en sus funciones tanto en la ANSES como en el Ministerio de Economía.

"Cuando se presenta el primer conflicto originario donde se entiende que Boudou ha participado de esa tercerización en la apropiación de una empresa privada en la cual tendría intereses directos decíamos que en él se reunían cosas que en un ningún otro ministro: era ministro de economía, fijaba el circulante y tener la empresa que lo fabrica", recordó Despouy.

Retomando lo que relata la obra literaria, el titular de la Auditoría señala: "tenía intereses directos en las empresas que favoreció, se favoreció a sí mismo y las adquirió siendo ministro".

"Es evidente que por lo menos hay incompatibilidad de intereses y la maniobra ahora empieza a dilucidarse con claridad y va a desembocar en su responsabilidad de los hechos", sintetiza Despouy.

"Confío en que la Justicia dictará sentencia pero considero que el Senado no podría seguir siendo presidido por él (Boudou)", consideró.

Además pidió que el Vicepresidente "se ponga a disposición de la Justicia para que la Justicia avance en un proceso donde hay pruebas muy contundentes", remarcó Leandro Despouy a EL POPULAR.

Intereses vs retórica

Consultado sobre el fallo del juez estadounidense Thomas Griesa que obliga a la Argentina a pagar a los denominados "fondos buitre", Despouy consideró que la decisión "afecta la solvencia de pagos y ha hecho un shock en las posibles inversiones".

"El Gobierno ha tenido una pésima negociación de la deuda en los últimos tiempos", indicó pero advirtió que la situación podría afectar a todos los países que han reestructurado sus deudas. Además reclamó que "se haga una negociación adecuada y ajustada a derecho, mucho más pensada en nuestros intereses que en el discurso".

El peligro de mirar hacia otro lado

La Auditoría General de la Nación es el órgano encargado del control del manejo de fondos públicos. En su labor de control y análisis ha puesto atención a la inversión en infraestructura que ha realizado el Ejecutivo nacional y en ese sentido ha presentado una serie de documentos que muestran preocupación por el estado de los servicios.

"Si uno mira hacia atrás, Menem llevó un proceso de privatización salvaje y sin los cuidados más elementales, eso hizo que la mayoría pasara a manos privadas y los organismos de control directo fueron muy lábiles y desatendieron (su función). En esta última década la política no va a hacer mejorar los servicios sino que la preocupación central fue financiar la prestación y cubrir la tarifa pero sin ningún tipo de control", detalló Despouy.

En ese razonamiento opinó que "las tareas a las cuales se destinaban los fondos, por ejemplo mantenimiento e inversión, no se cumplió por lo que la prestación del servicio es cada vez peor".

"El problema no era solo la pésima prestación de los servicios sino que la falta de mantenimiento 10 años después estaban peor y eso explica la tragedia de Once o de Rosario", sostuvo (N de R: la tragedia de Once refiere al accidente ocurrido el 22 de febrero de 2012 donde fallecieron 51 personas tras el choque de una formación del Tren Sarmiento). En tanto que en Rosario reseña el trágico hecho que ocurrió hace casi un año cuando un escape de gas y explosión en un complejo de edificios que causó 12 muertos.

"El Estado ha estado totalmente ausente en el control riguroso y responsable", se quejó el presidente de la Auditoría General de la Nación y subrayó que el problema "es cada vez peor" y concluyó con una fuerte frase: "la corrupción mata".

Respecto a la posibilidad de crear una Conadep de la corrupción, el experimentado abogado que contestó que "no importa si es una Conadep, una coordinación para colaborar con la justicia o la construcción de una nueva figura de fiscalías, lo importante es que haya algo. No puede pensarse en un próximo gobierno que previamente no haya esclarecido los aspectos más tétricos de la corrupción de éste".

El peso de la historia

"El radicalismo ha sido un partido que ha cumplido un rol histórico en la construcción y en la reconstrucción de la democracia, que no ha sido debidamente percibido ni valorado", sostuvo Despuy, quien a lo largo de su carrera diplomática representó al país ante la ONU.

Mencionó que ello ocurrió porque "han sido más exitosos los procesos clientelares" y porque el propio radicalismo "no reconstruyó su propia imagen sobre los valores que lo nutren".

Recordó que la presidencia de Raúl Alfonsín "fue un período muy positivo para el país" aunque culturalmente no se asume.

"Si no hubiese sido Alfonsín el presidente no habría habido ninguna posibilidad de una transición porque lo que ofrecía el Justicialismo era una reproducción del ´75, (Italo) Luder era el candidato; el hombre que había firmado los decretos de la exterminación de la subversión y había entregado al Ejército esa función", repasó.

"Cuando Alfonsín asumió la presidencia se encontró que no sólo debía juzgar los crímenes de las Fuerzas Armadas sino también los de la Triple A porque traíamos arrastrando una hoguera de sangre. Nada de esos se habla ni se conoce", sostuvo.

"El país le debe mucho a (Raúl) Alfonsín", subrayó y apuntó que el menemismo y el kirchnerismo se presentaron con proyectos culturales "que en el fondo no difieren demasiado" y son "apoderarse del Estado y distribuir sobre la base, transformándola en una hacienda propia". "Acá tenemos las consecuencias", concluyó Leandro Despouy.