Temor por el posible reinicio de incendios este fin de semana
El riesgo de incendios forestales en Córdoba sigue siendo extremo, con focos activos en la Quebrada de la Mermela y condiciones climáticas desfavorables para el fin de semana. Se mantienen alertas en varias zonas afectadas.
La provincia de Córdoba sigue en estado de alerta máxima debido al riesgo de reinicio de focos de incendio, ya que el pronóstico climático para el fin de semana anticipa condiciones desfavorables que podrían agravar la situación en varias localidades afectadas. El último reporte del Gobierno de Córdoba confirmó que el fuego continúa activo en la Quebrada de la Mermela y que en Villa Berna se mantiene la guardia de cenizas para evitar nuevos brotes.
Además, las autoridades informaron sobre reinicios de incendios en el Valle de Punilla, que afortunadamente fueron controlados a tiempo, aunque aún persisten las guardias preventivas en esas áreas.
El clima para los próximos días no es alentador. Según los especialistas, se espera un riesgo extremo de incendios durante el viernes, sábado y domingo, debido a la presencia de vientos fuertes y ráfagas que podrían propagar rápidamente las llamas en las zonas afectadas. Ante este escenario, las autoridades han solicitado la colaboración de vecinos y turistas para extremar las medidas de prevención y evitar cualquier actividad que pueda desencadenar un nuevo foco de incendio.
Por si fuera poco, la provincia continúa registrando sismos, lo que añade una preocupación adicional para los habitantes de Córdoba. Desde el domingo 29 de septiembre, se han registrado cuatro movimientos sísmicos en la región, con magnitudes que oscilaron entre 1.9 y 2.7 grados en la escala de Richter. Aunque estos sismos fueron clasificados como de intensidad muy débil, contribuyen al panorama desolador que vive la provincia en los últimos días.
Los incendios y sismos han afectado duramente a la provincia de Córdoba, y las condiciones climáticas no parecen dar tregua en el corto plazo. Los equipos de emergencia y bomberos siguen trabajando arduamente para mantener bajo control los focos activos, mientras las comunidades locales permanecen en alerta máxima.