La selección boliviana mostró una versión distinta en Villa Ingenio, pero el grito de gol nunca llegó. El empate 0-0 ante Uruguay dejó sensaciones encontradas en un equipo que generó juego, intentó por todos los medios y remató en 32 ocasiones, pero no logró vencer al arquero charrúa.

“La pelota no quiso entrar”, resumió Ramiro Vaca tras el partido, que deja a La Verde con 14 puntos en las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial 2026, pendiente de lo que haga Venezuela para mantener el puesto de repechaje.

Gabriel Villamil, Héctor Cuéllar, Robson Matheus y el propio Vaca probaron desde fuera del área, mientras que Carmelo Algarañaz estuvo cerca del tanto en varias oportunidades. Incluso el palo negó la apertura del marcador. Pese al esfuerzo, el arco rival quedó en cero.

Bolivia mostró actitud y propuesta ofensiva, pero deberá afinar la definición en sus próximos seis partidos si quiere asegurar un cupo a la Copa del Mundo.