La Justicia ha decidido que Bárbara Lanata tenga la capacidad de decidir sobre la salud de su padre, Jorge Lanata. La resolución, emitida por la magistrada Lucila Inés Córdoba, responde a la solicitud de las hijas del periodista en medio de acusaciones hacia Elba Marcovecchio, su esposa.

El fallo otorga a Bárbara voz y voto en las decisiones sobre los tratamientos médicos de Lanata, pero no le quita la potestad a Marcovecchio. Ambas deberán ser informadas sobre la evolución de la salud del periodista y podrán participar en las decisiones relacionadas.

Las hijas de Lanata habían presentado una demanda judicial acusando a Marcovecchio de “perjudicar la salud de su padre” y “hurtar elementos de gran valor”. En su solicitud, pidieron ser designadas como la red de apoyo de su padre en temas de salud y tratamientos médicos. También propusieron a Alejandra Mendoza como encargada de administrar el patrimonio del periodista, un rol que ha ocupado en los últimos años.